Los Yamomanis


En el Amazonas había una tribu indígena que vivía tranquila y feliz. Se alimentaban de la fruta que encontraban en la selva, de algunas plantas, de lo que pescaban en el río o de algo de caza que conseguían después de andar y correr durante bastantes horas. Y así vivían hasta que llegó el hombre blanco. Una empresa petrolífera construyó un puerto a orillas del río, muy cerca de de donde vivían los yamomanis y para no tener problemas con ellos les ofrecieron comida gratis para todo el poblado.

El Gran Chamán de la tribu les advirtió de que no aceptaran el trato y no dejaran sus costumbres para seguir las del hombre blanco. Pero no le hicieron caso. Los yamomanis dejaron de andar para conseguir caza, pescar o recolectar fruta y se dedicaron a comer todo lo que les daba el hombre blanco: hamburguesas, refrescos, pizzas, salchichas, alimentos congelados...

El Gran Chamán se marchó enfadado y les adviertió de que pronto caería su maldición sobre ellos. Los yamomanis no se preocuparon mucho, hasta que la maldición les llegó. Se habían puesto tan gordos que casi no podían moverse y empezaron a tener enfermedades que ni siquiera conocían.

Los yamomanis decidieron mandar al pequeño Laburu para pedirle al chamán que les retirara la maldición. El Gran Chamán sólo le puso una condición: tendría que atrapar un cachimaro corredor, el pájaro más rápido de la selva. Si lo conseguía, la maldición desaparecería.

¿Conseguirá el pequeño Laburu atrapar al cachimaro? ¿Desaparecerá entonces la maldición que recae sobre su pueblo y sobre él mismo?

Los yamomanis es una divertida historia que nos hace reflexionar sobre la importancia de una alimentación sana, variada y equilibrada para poder estar sanos y fuertes.